Audrey Hepburn en toda su grandeza

Mario C. Gentil / 18.01.2022

La icónica y colosal actriz Audrey Hepburn, que protagonizó Vacaciones en Roma (1953), Sabrina (1954), Ariane (1957), La calumnia (1961), Desayuno con diamantes (1961), Charada (1963), My Fair Lady (1964), Sola en la oscuridad (1967) o Dos en la carretera (1967), entre otras grandes obras, recibirá un homenaje por parte de la cadena de cines mk2 Cinesur. Y lo hará de la mejor manera posible, dando pases de cuatro de sus mejores películas. Cada martes de febrero, a las 20:00h y en VOSE, tendremos la maravillosa oportunidad de volver a ver al mito del cine en pantalla gigante en diferentes cines de la mitad sur peninsular.

Desde esta web que adora el séptimo arte, no puedo sino celebrar, aplaudir y difundir esta genial propuesta. Las reposiciones de obras pretéritas, clásicas o no, son cada vez más una idea que los cines, poco a poco, van aplicando, y que, a mí y a muchos enamorados del cine, nos pone muy felices comunicar.

Fotograma de *Desayuno con diamantes* (1961).

No todos hemos tenido la suerte de poder ver estas obras al tamaño que merecen, para el que fueron concebidas y realizadas. La gente sigue naciendo, y las nuevas generaciones tienen derecho a tener la oportunidad de contemplar muchas grandísimas piezas artísticas lo más fielmente posible a la grandeza con la que en su día fueron estrenadas en las salas de cine de todo el mundo. La inmensa mayoría de cine pasado que se consume, es de manera casera, generalmente en televisiones, o en pequeños proyectores que cada cual tiene en su casa. También hay entusiastas grupos de cinéfilos por todo el mundo que se organizan para programar sesiones de cine fórum. A su vez, existen entidades culturales que crean eventos para revisar obras en salas medianas. Y también hay algunos plácidos cines de verano donde, al calor nocturno o a la brisa del estío, podemos contemplar en gran tamaño grandes obras de la historia del cine.

Pero que se repongan en cines comerciales, en el medio donde sin cesar desde su nacimiento, se siguen estrenando las nuevas producciones, es un paso de gigante en la reeducación de la mirada cinematográfica, y sobre todo, en la divulgación de cine, para que la gente joven y no tan joven que no haya visto estas películas, tengan la suerte de tener esta experiencia, y puedan conocer un cine diferente al actual. Y para los que hemos visto muchas obras del pasado, no es sino un regalo, el poder volver a verlas en su máxima potencia y calidad.

Solo queda que este tipo de ideas sean un éxito monetario, único requisito para que los empresarios que las realizan puedan o quieran seguir haciéndolo, y con más frecuencia, lo que repercutiría en beneficio de todo el mundo, y en una puesta en valor de la historia del cine. La historia de un arte, al que, como la música, todo el mundo ama, pero que, sin embargo, a menos gente le llega.